Memoria RAM: ¿qué hay detrás?

El concepto de memoria RAM aparece una y otra vez al comprar un ordenador, una tablet o un smartphone. Incluso en las smart TV, la última generación de televisores, el tamaño de la memoria RAM tiene un papel importante en el rendimiento del dispositivo. Al fin y al cabo, ya sea para ver películas en streaming, navegar por Internet o escribir correos electrónicos, con cada acción se cargan datos en el dispositivo que hay que guardar temporalmente. Para que la comunicación entre los distintos componentes funcione con rapidez, los fabricantes de ordenadores utilizan la memoria RAM. Entonces, ¿qué es exactamente la RAM?

La memoria RAM (las siglas en inglés proceden de random-access memory) es una memoria a corto plazo en la que el sistema operativo de un dispositivo almacena temporalmente todos los programas y procesos en ejecución. Por así decirlo, sirve de memoria a corto plazo de un ordenador y facilita al procesador los datos que necesita para calcular los procesos y programas que se están ejecutando en ese momento.

El ordenador almacena incluso versiones intermedias de, por ejemplo, una hoja de Excel en la memoria RAM, que el procesador puede recuperar en cualquier momento. La rapidez del ordenador en este proceso depende en gran medida de la velocidad de lectura y escritura, así como de la tasa de transferencia de datos y la capacidad de almacenamiento de esta memoria. Si la memoria RAM está sobrecargada, verás en pantalla una rueda circular o una representación visual similar. En este caso, el ordenador indica que está operativo, pero que aún no ha recuperado completamente los datos necesarios de la RAM.

El diagrama anterior ilustra la función de la memoria RAM. La mejor manera de explicarlo es utilizando el ejemplo de una hoja de Excel. Si abres una hoja de cálculo almacenada en el disco duro, el programa (en este caso Excel) copia los datos en la memoria RAM. El procesador accede ahora a esos datos y los procesa. El envío de los datos de la RAM al procesador se produce a través de los llamados bus de datos. Esto se hace más deprisa a través de la RAM, ya que el acceso de lectura y escritura es mucho más rápido que cuando se accede al disco duro. En cuanto terminas de trabajar en Excel y haces clic en “Guardar”, el ordenador guarda los datos de la memoria RAM en el disco duro o en otro medio de almacenamiento.

La memoria RAM almacena temporalmente en la caché los datos que utilizas con especial frecuencia cuando trabajas con el ordenador. La caché es una pequeña parte de la RAM que está directamente conectada al procesador. Esto garantiza un acceso especialmente rápido. Si cambias de comportamiento de trabajo, la memoria RAM sustituye automáticamente los datos utilizados con menos frecuencia por los más utilizados en la actualidad.

Cuanta más memoria RAM tiene un equipo, más rápido funciona. Pero, por supuesto, con una RAM más potente, no solo aumenta el rendimiento, sino también el precio de un dispositivo. Por lo tanto, deberías comprobar de antemano cuánta memoria RAM necesitas realmente. Esto a su vez depende, entre otras cosas, del trabajo que realices y de cuántos programas se estén ejecutando al mismo tiempo.

De esta manera, 2 GB de RAM son suficientes para una tablet que solo se utiliza para navegar. Si vas a comprar un ordenador para uso profesional, por ejemplo, para realizar trabajos complejos como la edición de vídeo o el desarrollo de videojuegos, merece la pena invertir en una RAM de 8 GB o 16 GB.

Como pequeña orientación, puedes basarte en los siguientes valores:

• 4 GB de RAM: si utilizas el dispositivo principalmente para navegar, enviar correos electrónicos y trabajar con aplicaciones de Office, una memoria RAM de 4 GB es suficiente.
• 8 GB de RAM: son óptimos si utilizas el ordenador con frecuencia y ejecutas varias aplicaciones al mismo tiempo. Esta capacidad de la RAM también es suficiente para muchos juegos actuales sin requisitos adicionales.
• 16 GB de RAM: una memoria RAM de 16 GB es ideal para los juegos y las tareas informáticas que requieren un alto rendimiento, como la edición de vídeo y la programación.

Si ya sabes qué programas vas a utilizar antes de comprar el dispositivo, es aconsejable que tengas en cuenta las recomendaciones y los requisitos mínimos de esas aplicaciones.

Una memoria RAM de 2 a 4 GB suele ser suficiente para los usuarios de smartphone. Esta memoria RAM ya está instalada en los móviles Android más baratos. Apple equipa sus smartphones, como el actual iPhone XR, con 3 GB de RAM, por ejemplo. También hay smartphones con 8 GB de RAM, pero se trata de teléfonos de gama alta.

La memoria RAM existe desde los inicios de la informática. Con el paso del tiempo, los científicos han desarrollado nuevos tipos de memoria RAM que consumen menos energía y, al mismo tiempo, tienen una mayor capacidad y velocidad. Ya a finales de la década de 1990 y principios de los 2000, se podía elegir entre RAM estática (SRAM), RAM dinámica (SRAM) o RAM síncrona y dinámica (SDRAM).

Hoy en día, los ordenadores suelen venir equipados con una RAM de tipo DDR, mientras que las estaciones de trabajo y los servidores profesionales utilizan principalmente la RAM ECC. Además, se distingue entre RAM con búfer y registrada, como la DIMM, SO-DIMM y NVDIMM.

DDR procede del término en inglés double data rate. Traducido literalmente, significa “doble tasa de datos”. Y esto es precisamente lo que hace la memoria RAM DDR. La velocidad a la que los buses intercambian datos entre la RAM y el procesador puede duplicarse. Actualmente, la DDR5, con hasta 50 Gbps, ya está en a punto de salir, por lo que el número al final siempre indica la generación. En este caso, el 5 significa la quinta generación de memoria DDR.

Por su parte, RAM ECC se refiere a error correction code. Si la RAM detecta errores en los datos, los corrige de forma automática. Mientras que las memorias que no son ECC siempre tienen un número par de chips, una RAM ECC está equipada con un chip adicional por cada ocho módulos de memoria. Este chip adicional se encarga de detectar errores. Como se ha indicado anteriormente, esta memoria RAM se utiliza casi exclusivamente en servidores y estaciones de trabajo profesionales. Los sistemas bancarios, por ejemplo, utilizan la RAM ECC para garantizar que el dinero llega al destinatario correcto.

Mientras que con la RAM sin búfer (unregistered o UDIMM) el chipset de la placa base selecciona las ubicaciones correctas de la memoria para los datos solicitados, con la RAM registrada (RDIMM), esto lo hacen dos chips de registro instalados en el módulo de memoria. Por lo tanto, este tipo de memoria RAM realiza la asignación de forma independiente y libera al chipset de la placa base.

La RAM registrada suele encontrarse en el entorno de los servidores. La RAM sin búfer, en cambio, es más adecuada para dispositivos con poca RAM. Si la memoria RAM es mucho mayor y, por lo tanto, también el número de módulos RAM, la carga en el chipset de la placa base aumenta, ya que cada módulo RAM requiere el mismo número de líneas de dirección.

DIMM proviene de dual inline memory module. Esto significa que los contactos dorados de la parte inferior del módulo RAM son capaces de transmitir diversas señales y, por lo tanto, permiten un intercambio más rápido entre la RAM y el procesador. A diferencia de la SIMM (single inline memory module), la parte delantera y la trasera no están conectadas eléctricamente.

Los siguientes tipos de DIMM pueden instalarse en dispositivos informáticos:

• UDIMM: se trata de la memoria RAM sin búfer mencionada anteriormente.
• RDIMM: RAM registradas.
• SO-DIMM: estas memorias RAM son adecuadas para portátiles y ordenadores pequeños debido a su tamaño reducido y su bajo consumo de energía. SO se refiere a small outline.
• NVDIMM: son memorias RAM especiales, ya que, si desconectas el aparato de la corriente, los datos permanecen almacenados en la RAM y vuelven a estar disponibles cuando se enciende. NV procede de non-volatile, es decir, “no volátil”.