¿Cuánto cuesta hacer una página web?

¿Tienes una idea eacta de cómo quieres que sea tu página web, pero no estás seguro de qué coste tendrá? Te explicamos de forma realista qué costes deberás tener en cuenta, dependiendo del tipo de página web que estés planeando crear y del tiempo y los conocimientos previos que tengas.

¿Cuánto cuesta una página web? Factores a tener en cuenta

Es difícil responder a esta pregunta, pues el espectro va desde 5 a 100 000 euros. En este artículo te damos una idea de cuál debería ser tu presupuesto en función de tu caso particular y qué soluciones técnicas podrían ajustarse a ello. Además, tendrás que considerar una serie de costes adicionales:

• Mantenimiento regular: Debiado a la instalación de actualizaciones, eliminación de vulnerabilidades de seguridad y cumplimiento de nuevas normativas legales. Si no tienes este servicio integrado, deberás tener en cuenta los costes de los proveedores de servicios.
• Optimización para motores de búsqueda (SEO). Intenta hacer que tu presencia online resulte fácil de encontrar a posibles visitantes.
• Publicidad y marketing. Según la estrategia que sigas, podrían añadirse costes de publicidad (por ejemplo, Google Ads y anuncios en redes sociales), marketing por correo electrónico, etc.

Al planificar tu presupuesto, también debes considerar los costes indirectos. Por ejemplo, ¿debes mostrar en tu web tu identidad corporativa? Si no quieres diseñar un logotipo usando una herramienta online, deberás contar con gastos para contratar a un diseñador.

¿Cuánto cuesta crear una página web? Comparación de las diferentes posibilidades

Los costes de una página web dependen en gran medida de tus objetivos y de cómo quieres implementar el proyecto. Cuanto más tiempo y conocimientos previos tengas, más asequible será la implementación.

¿Qué soluciones se ajustan a tu proyecto?

Ya hemos esbozado las posibilidades técnicas para llevar a cabo un proyecto de tu página web:

• Creador web
• CMS (Content Management System)
• Programación
• Servicio de diseño web

Con las dos primeras opciones puedes crear una página web sin tener conocimientos IT específicos y sin un coste elevado. Con las dos últimas, trabajarás con agencias o con proveedores de servicios, aunque te supondrá un coste mayor.

Para facilitar la decisión, te presentamos las ventajas e inconvenientes de cada opción.

Creador web

Para muchas páginas web sencillas (blogs, portafolios, páginas web de empresas pequeñas), basta con un creador web. Existen diversos proveedores en el mercado, pero el principio de los creadores web es siempre el mismo: el usuario puede elegir entre varias plantillas de diseño, adaptar los elementos de la página e insertar su propio contenido a través de un editor WYSIWYG. Dependiendo de la tarifa elegida, tendrás más o menos posibilidades de personalización. La mayoría de las veces, las funciones para la optimización en los motores de búsqueda están integradas o pueden añadirse.

Muchos proveedores también se encargan del alojamiento y del registro del dominio e integran una dirección de correo electrónico que coincide con el dominio, así no tienes que preocuparte por estos detalles técnicos. Merece la pena realizar una comparación precio-prestaciones: según el proveedor, los tipos de creadores de páginas web pueden costar hasta 40 euros al mes. No hay ninguna otra solución técnica que preste servicios a un precio menor.

Sistema de gestión de contenidos (CMS)

Muchos usuarios cambian los creadores web por sistemas de gestión de contenido después de un tiempo. Puedes encontrar un resumen de los proveedores más importantes en nuestra comparación de CMS. Los gestores de contenido también ofrecen interfaces gráficas y muchas plantillas y más libertad de diseño. Presentan plugins para casi cualquier función, de manera que los aficionados a la informática puedan arreglárselas sin ayuda externa. Incluso las tiendas electrónicas más sencillas pueden crearse y publicarse sin ayuda profesional. Una desventaja es que las extensiones pueden repercutir en el funcionamiento de la web y tener un impacto negativo en su rendimiento. Otra ventaja de los CMS es que son adecuados para proyectos en desarrollo cuyas necesidades y tráfico aumentan rápidamente.

Si te decides por un CMS, deberás ponerte en contacto con un informático, ya que al contrario que con los creadores web, estarás a tu cargo a la hora de implementar tu página web. Para solucionar problemas técnicos, que surgirán tarde o temprano, y para el mantenimiento de la web, deben planificarse costes adicionales.

También tendrás que encargarte del registro del dominio y el alojamiento. Estos servicios tienen un coste mensual. El alojamiento puede costar hasta 50 euros al año, y el registro del dominio hasta 20 euros al año. Para el CMS en sí no hay costes, en caso de que se utilicen soluciones de código abierto como WordPress o TYPO3.

IONOS ofrece un hosting para WordPress, con el cual las actualizaciones de los temas y las extensiones se hacen automáticamente y se eviten problemas de seguridad.

Agencias de diseño web y trabajadores autónomos

La solución más cómoda es probablemente encargar tu página web a un profesional según tus indicaciones. Sin embargo, esta opción es también la más cara. Aun así, para la complejidad de los requisitos de las tiendas online o las aplicaciones web, el enfoque profesional es el único posible.

Si quieres encargar a alguien tu página web y aun así reducir costes, existe la opción de colaborar con proveedores individuales: un diseñador para la creación de la interfaz y un programador para las funcionalidades de la página web. En este caso, deben tener experiencia en gestión de proyectos o tener conocimientos sobre funcionalidad y experiencia de usuario. De esta manera, la página web no solo funcionará técnicamente, sino que también será agradable para los usuarios.

Si quieres más consejos, es recomendable acudir a una agencia. Allí trabajan diseñadores, programadores y gestores de proyectos, los cuales pueden ocuparse de tus necesidades, mostrarte las posibilidades que tienes y planificar tu proyecto de manera que puedas lograr resultados de la manera más rápida posible. ¿Cuánto cuesta una página web encargada a profesionales? La inversión puede alcanzar las cinco cifras. Por ello, asegúrate de que tu proyecto se basa en un análisis de mercado concreto y tiene perspectivas de éxito sólidas.

En este caso, además de los costes de desarrollo de la página web, existen costes adicionales por el dominio y el alojamiento. Si quieres alojarte a través de un servidor virtual privado, debes planear unos 30 euros al mes para ello.

Servicio de diseño web

Además de una agencia de diseño, también puedes contratar un servicio de diseño web con proveedores de hosting que trabajan con expertos que ayudan a alcanzar tus objetivos. La ventaja de esta opción es que el diseño y la oferta de alojamiento (normalmente incluye dominio y certificado SSL) provienen del mismo proveedor. Esto puede ser positivo en el mantenimiento y la atención al cliente.

Con un servicio de diseño web, obtendrás una mezcla entre la consultoría individual y un creador web. Gracias a la ayuda de profesionales, obtendrás un buen resultado sin necesidad de invertir mucho tiempo o dinero en el concepto de tu diseño. Sin embargo, elegirás tu diseño entre una serie de plantillas y los expertos la adaptarán según tus necesidades. De esta manera, es posible obtener ayuda profesional sin pagar un coste tan alto como el de las agencias de diseño web.

¿Cuánto cuesta una página web? Tipos como factor principal

Las páginas web pueden ser categorizados en diferentes tipos. Cuál de ellos será más conveniente para tí dependerá del objetivo de tu empresa o proyecto. Entre ellas difieren no solo en su estructura, sino también en el esfuerzo técnico necesario para su desarrollo y mantenimiento. Esto, a su vez, influye en el presupuesto que debe planearse para el proyecto.

En este diagrama se puede observar el grado de dificultad correspondiente a cada implementación técnica:

1. Página de destino o landingpage. No importa si creas una página de ventas sencilla o una página informativa, el coste y el esfuerzo técnico son bajos. Mientras existan interfaces con sistemas de comercialización por correo electrónico, las direcciones de correo pueden recogerse y generar ventas a partir de redirecciones a sistemas de comercio electrónico.

2. Porfolio. Si quieres presentar información sobre ti o tu trabajo creativo en una página de portafolio, puedes utilizar sistemas CMS como WordPress o TYPO3, que producirán resultados profesionales incluso para usuarios no técnicos sin requerir demasiada personalización.

3. Blog/revista: Si lo que buscas es publicar regularmente contenido en tu página web, dar importancia al diseño creativo, recopilar las direcciones de correo electrónico de tus lectores y tener la posibilidad de vender productos, un CMS será una buena opción. Sin embargo, a la larga es posible que quieras personalizar tu página, lo cual requerirá conocimientos de programación.

4. Micrositio. Para crear páginas web interactivas sobre un tema especializado e implementar diseños originales, necesitarás conocimientos IT. Los micrositios suelen programarse total o parcialmente de forma individual, por lo que suele recurrirse a ayuda profesional.

5. Web corporativa. Puedes crear una página web corporativa sencilla usando un creador web sin tocar una sola línea de código. Pero si tienes objetivos más específicos con tu página, necesitarás técnicas de desarrollo web. En particular, en las páginas web multilingües o las páginas con contenido dinámico y aplicaciones integradas, el grado de dificultad de implementación aumenta.

6. Comercio electrónico. Puedes crear una tienda online sencilla con un creador web. Las tiendas en línea más grandes presentan más dificultad técnica. Además, deben tenerse en cuenta los costes de las soluciones de pago y de los envíos.

7. Las aplicaciones web. Dependiendo de la gama de funciones, el precio de estas páginas web puede llegar hasta las seis cifras. Este tipo de proyectos solo puede ser gestionado por una agencia o un equipo de autónomos competente.

Más que costes financieros: otros costes que tener en cuenta

Además del tipo de página web, hay tres factores adicionales que determinan cuánto presupuesto necesitas para tu proyecto online: tiempo, dinero y conocimientos.

Tal y como muestra la imagen, cuanto más dinero tengas a tu disposición, menos tiempo y conocimientos necesitarás para crear tu página web. Dicho de otra forma: se puede compensar la escasez de conocimientos y tiempo si se dispone de los medios económicos necesarios. Por su parte, si quieres reducir el presupuesto a la hora de crear una página web, puedes invertir más tiempo en el proyecto para adquirir los conocimientos necesarios y asumir gran parte de las tareas. Si ya cuentas con los conocimientos necesarios, necesitarás también menos tiempo para poner en pie tu proyecto.

FAQ

A continuación, hemos recopilado las preguntas y respuestas más importantes sobre el tema.

¿Qué tipos de páginas web existen?

Las páginas web se pueden categorizar en siete tipos diferentes:

1. Landing page
2. Portfolio
3. Blog/Revista
4. Micrositio
5. Web corporativa
6. Comercio electrónico
7. Aplicación web

¿Qué opciones existen para crear una página web?

Las opciones técnicas disponibles para desarrollar un proyecto web son:

• Sistema de creación de páginas web
• Sistema de gestión de contenidos (CMS)
• Programación personalizada
• Servicio de diseño web

Con las dos primeras opciones, incluso quienes no cuentan con conocimientos técnicos específicos pueden publicar una página web, mientras que en las dos últimas opciones se requiere comúnmente la colaboración con agencias u otros proveedores de servicios.

¿Cómo se puede crear una página web sin gastar en exceso?

Si no cuentas con muchos conocimientos de programación, las páginas web se pueden crear de la manera más económica utilizando un creador de páginas web o un CMS.

¿Cuáles son los costes indirectos de una página web?

Los costes indirectos de una página web pueden incluir, por ejemplo, los siguientes aspectos:

• Diseño de logo
• Mantenimiento (instalación de actualizaciones, cierre de brechas de seguridad, implementación de nuevas normativas legales)
• Costes de proveedores de servicios (por ejemplo, hosting)
• Costes de marketing (por ejemplo, anuncios en Google Ads)