Instagram Stories vs. Snapchat Stories: ¿es Instagram el nuevo rival de Snapchat?

Al principio, la contraposición Snapchat vs. Instagram puede resultar sorprendente para muchos, pues, después de todo, ambos servicios tienen un enfoque fundamental muy diferente. En Snapchat la comunicación tiene lugar dentro de un pequeño círculo de usuarios con los que se comparten fotos, vídeos cortos y mensajes de texto. Por su parte, Instagram es un servicio para compartir fotos y vídeos que se centra en la publicación de contenidos dentro de una red en la que la mayoría de perfiles son públicos.

Sin embargo, con el paso del tiempo, la funcionalidad de estas plataformas ha ido pareciéndose más y más. Esto se hace especialmente evidente al comparar la función para compartir historias (stories), una característica implementada por Snapchat en 2013 con “My story”. Desde entonces, Snapchat Stories ha permitido que los usuarios crearan historias con vídeos y fotos, que estarían disponibles durante 24 horas. De igual manera, Instagram integró una función para compartir historias, Instagram Stories, exactamente tres años después de que Snapchat lo hiciera. Ahora bien, ¿cuáles son las diferencias de ambos formatos? Y, con su nueva función, ¿se convertirá Instagram en un competidor a largo plazo para Snapchat o logrará incluso sacarlo del mercado? 

Tanto Instagram como Snapchat son plataformas en las que los usuarios utilizan, principalmente, fotos y vídeos para presentarse y comunicarse entre sí. Ambas plataformas se lanzaron como aplicaciones y, aunque en sus inicios sus funciones tenían enfoques completamente diferentes, actualmente han implementado características muy similares, convirtiéndose así, en servicios cada vez más parecidos. Esta es tal vez la única forma en la que ambas plataformas podrían convertirse en rivales, algo que se hace particularmente evidente cuando se comparan las funciones de Snapchat e Instagram Stories.

Instagram comenzó como una plataforma de fotoblogging en 2010 y, desde entonces, se ha convertido en la red social de su tipo más utilizada. Facebook reconoció el potencial de Instagram relativamente temprano y lo negoció de inmediato, comprando la plataforma en 2012 por mil millones de dólares. En un principio, este servicio solo podría ser usado como aplicación, de esta forma las imágenes tomadas con los smartphones podrían ser publicados fácilmente en Instagram. Sin embargo, en 2013, Instagram lanzó una versión web.

El mismo año se implementaría la función de vídeo, con la que los usuarios podían publicar vídeos cortos (en 2016 la longitud máxima de cada clip pasó de 15 a 60 segundos). A finales de 2013, también se añadió la posibilidad de enviar fotos y vídeos de forma privada a otros usuarios: Instagram Direct. Con esta función, Instagram se aproximó a los servicios de mensajería, pues ahora es posible comunicarse y comentar internamente las publicaciones. Igualmente, el usuario puede decidir si quiere hacer sus publicaciones públicas, compartirlas solo con sus seguidores o únicamente con algunos usuarios en Instagram.

En sus inicios, el único punto negativo de la aplicación era que solo era posible compartir imágenes con una proporción 4:3 (similar a los antiguos formatos de Kodak y Polaroid). Aunque este tamaño sigue vigente actualmente, desde 2015 los usuarios tienen a su disposición diferentes formatos para publicar sus fotos y vídeos. Con la introducción de Instagram Stories en 2016, los desarrolladores de Instagram copian la hasta entonces novedosa función de Snapchat “My Story”, en donde las imágenes y vídeos publicados estaban disponibles solo durante 24 horas. Ahora bien, esta no fue la única función que Instagram copió de Snapchat: tanto Instagram Direct como la posibilidad de añadir stickers, texto y otros elementos a las historias, hizo evidente la imitación.

El uso y el propósito de Instagram han cambiado paralelamente a la implementación de sus numerosas características. Mientras en el pasado se trataba de conseguir tantos seguidores como fuera posible y convertir los contenidos publicados en una especie de archivo, la tendencia es ahora dirigir el cambio hacia una comunicación más inmediata y privada. Las Instagram Stories cubren ambas necesidades: las historias creadas por los usuarios pueden ser publicadas abiertamente o compartidas con otros usuarios por mensajes privados.

El parecido entre Snapchat e Instagram es evidente en el formato de sus “stories”, cuyas funciones solo se diferencian en algunos pequeños detalles. Ambos servicios ofrecen una plataforma ideal con funciones de videodiario. Con esta función, los usuarios particulares pueden documentar, en un rango de 24 horas, sus viajes o actividades diarias y compartirlos fácilmente con otros usuarios. Además, las empresas y organizaciones pueden promocionarse a sí mismos o comercializar sus productos. Estas historias son particularmente apropiadas para alcanzar a una audiencia más joven. 

En la actualidad, únicamente Snapchat Stories permite la implementación de acciones tradicionales de marketing. Esto quiere decir que, por ejemplo, se puede incluir un vídeo promocional entre las historias y, a la vez, dirigirlo a un público objetivo especificado previamente (p. ej., género, edad o ubicación). También es posible patrocinar filtros (animaciones y efectos que se colocan sobre la cara) o geofiltros (ilustraciones basadas en la localización del usuario). Taco Bell, la cadena estadounidense de comida rápida, hizo una campaña de filtros muy particular, con la que reemplazaba la cara de los usuarios por un taco que solo hacía visible los ojos y la boca de la persona. Además de la extraña animación, la foto también incluía el logotipo de la empresa. La campaña de Taco Bell tuvo un gran éxito en Snapchat, generando aproximadamente 224 millones de vistas en un solo día.   Aunque Instagram Stories ofrece oportunidades de publicidad similares, estas se encuentran, hasta ahora, en una fase de prueba. Esto quiere decir que, en un futuro, las empresas tendrán a su disposición herramientas de publicidad que se suman a las oportunidades que, de por sí, ya ofrece esta plataforma. Alejándose un poco del espacio publicitario tradicional, cabe resaltar que el formato de Instagram y Snapchat Stories ciertamente ofrece un gran potencial para campañas de marketing: puedes grabar vídeos cortos presentando un nuevo producto o mostrar la vida interna de tu empresa u organización. De la misma forma puedes documentar eventos corporativos en forma de historia. Aunque las opciones respecto al marketing en Instagram y Snapchat Stories todavía no están muy extendidas en Europa, esto también representa muchas oportunidades. Ciertamente, aquí se requerirá mayor creatividad en comparación con otras campañas de marketing en redes sociales. Sin embargo, cuando se tienen las ideas y el contenido para implementar una campaña de historias, se generará un impacto duradero, en especial, en la audiencia más joven.

En general, Instagram tiene un mayor alcance, pues el servicio tiene muchos más usuarios que Snapchat (Instagram tiene registrados unos 600 millones de usuarios; Snapchat cuenta con aproximadamente 150 millones). Muchas organizaciones y empresas cuentan ya con una gran comunidad de seguidores a la que mostrar sus historias. Adicionalmente, Instagram Stories permite enlazar a una web y remitir a contenidos fuera de Instagram (en Snapchat esto solo es posible pagando una cuota adicional).

Por otro lado, Snapchat permite delimitar mejor al público objetivo, pues esta aplicación es especialmente popular entre los adolescentes y jóvenes entre los 20 y 25 años. En aquellos mercados donde las estrategias de marketing no son muy populares, la plataforma ofrece la oportunidad a las empresas de presentarse a sí mismas o a su marca como “Early Adopter”.

En general, a la hora de crear una historia, tienen que considerarse los diferentes enfoques de las plataformas y alinear la historia de la mejor manera posible. Los mensajes en Snapchat suelen dar una impresión espontánea y juvenil, mientras que el contenido en Instagram impresiona con un aspecto más profesional y en cierta medida “pulido”. En principio, es posible utilizar ambas plataformas para publicar la misma historia, aunque nunca está de más considerar las diferentes características de cada plataforma y tenerlas en cuenta a la hora de producir el contenido.

Para nadie es un secreto que, con su plataforma para crear y compartir fotos y vídeos, Facebook Inc. quiere hacerle la competencia a Snapchat. Sin embargo, aún está por ver si Instagram Stories y sus demás características (mensajes que se eliminan automáticamente, stickers y filtros adicionales) realmente tendrán éxito. Sigue existiendo el riesgo de que Instagram, con la introducción de funciones muy parecidas a las de Snapchat, haya molestado a algunos de sus usuarios más leales. La manera en que el público aceptará estas y otras nuevas características todavía no se ha definido completamente. Además, el pasado ha demostrado que copiar este tipo de servicios no significa que estos vayan a ser igual de exitosos que los originales, tal y como sucedió con Google+, la plataforma con la que el gigante de los buscadores intentó competir, sin éxito, con Facebook.

No obstante, cabe la posibilidad de que Instagram robe una parte de la cuota de mercado de Snapchat. Después de todo, Instagram ya cuenta con un gran número de usuarios, que incluye también a muchos jóvenes que se identifican más con las características de Snapchat, de igual modo que millones de usuarios se han identificado con Instagram. Según la compañía, en seis meses la plataforma podría ganar más de 100 millones de usuarios, un aspecto que muy seguramente se vio influido por la introducción de Instagram Stories. 

Cuando se aprecia el modo en que la funcionalidad de Snapchat se desplaza cada vez más hacia la mensajería instantánea, es fácil darse cuenta de que, más allá de Instagram, Snapchat tiene muchos más competidores. En este sector, el líder del mercado es, sin duda alguna, Whatsapp, mientras que Facebook Messenger se posiciona como otro gran rival en este campo. Tanto Instagram como las otras dos aplicaciones forman parte del grupo Facebook Inc., adaptando también varias características de Snapchat (en Whatsapp ya es posible añadir descripciones a las fotos y los vídeos creados con Facebook Messenger pueden editarse con animaciones). En su funcionalidad clásica (mensajería de imágenes y de historias) y en sus nuevas características como plataforma de mensajería instantánea, Snapchat tiene a esta gran corporación como principal rival.

El futuro demostrará si Snapchat puede sobrevivir ante Facebook Inc., algo que también dependerá de los usuarios. El hecho de que estos se mantengan fieles a Snapchat fijará los cimientos para el éxito futuro. Otro factor adicional es la expansión de las oportunidades publicitarias en Snapchat y de las fuentes de ingresos asociados a estas. En algún punto, la aplicación probablemente concentrará sus esfuerzos en este último aspecto.

La última innovación de Snapchat fue el “Snap Spectacles”, unas gafas de sol con una cámara integrada y una función de sincronización para la app de Snapchat. Además, en 2017, Snap Inc. (la compañía dueña de Snapchat) tiene planeado salir al mercado de valores. Así, el éxito de Snapchat a largo plazo dependerá de diferentes criterios. Mientras tanto, la rivalidad entre Snapchat vs. Instagram, así como con otros servicios de Facebook Inc., se mantendrá por un largo periodo de tiempo.